Esperábamos con expectativa que en el mensaje presidencial se anunciaran soluciones creativas que permitan cubrir la falta de atención médica al 23% de la población. En realidad el gobierno no tiene ninguna propuesta innovadora que mostrar en este acápite, pues la actual Reforma de Salud no es más que un nombre con mucho marketing de lo mismo que ya pretendió hacer el gobierno 2006-2011. Leer más
En cumplimiento del mandato constitucional, el mensaje presidencial, que debió haber sido, principalmente, de balance, se convirtió en uno de promesas de gasto, con una clara inclinación populista, a tal punto, que parecía uno de época de campaña electoral.
Ha sido un mensaje desconcertante, en el que no encontramos indicadores de ningún tipo, menos sanitarios. No se ha señalado estrategia alguna para revertir los malos indicadores de salud que conocemos y que han empeorado en los últimos 3 años. Algunos ejemplos: la anemia infantil, la tuberculosis, el dengue, la malaria, etc.
Los 3 componentes esenciales de la salud no han sido tocados. Estos son: 1.- Las actividades preventivas, de promoción y salud pública, 2.- La medicina curativa y 3.- Las emergencias y desastres. Tampoco se ha mencionado el Sistema de Salud, visto en su totalidad, como corresponde a un estadista. Leer más
Un proceso de reforma requiere, luego del diagnóstico, objetivos claros y medios para lograrlos. En nuestro país no existe un diagnóstico del estado de la salud y de las necesidades de transferencia de tecnologías sanitarias que urge obtener. El gobierno ha promulgado, en el marco de la Reforma de Salud, el Decreto Legislativo 1168 para mejorar la atención de salud a través del desarrollo y la transferencia de tecnologías sanitarias. Esta norma de enorme vaguedad, preocupa, pues abre las puertas al monopolio.
Las necesidades de atención médica y de salud de nuestra población son grandes. El 23% no tiene atención médica y el 60% tiene una atención insatisfactoria y no integral. Para cerrar estas brechas se necesita más médicos, más recursos humanos, más infraestructura, equipos, insumos y medicamentos. Es decir más inversión pública y privada.
En el lustro 2006-2011 se construyeron e inauguraron más de 20 hospitales nuevos, aunque algunos aún no funcionan a plenitud debido, entre otros aspectos, a la escasez de médicos y la falta de continuidad en las inversiones. El Congreso de la República ha creado comisiones investigadoras para ver estos casos y en buena hora que se investiguen, y si encuentran irregularidades o dolo que se corrijan y se sancione a los responsables, pero las inversiones no deben detenerse.
Desde el 2011 se debate en el Congreso de la República los mecanismos para incrementar la oferta de especialistas en medicina que permitiría cerrar la brecha existente de 6,000 médicos especialistas en Essalud, 5,300 en el Ministerio de Salud y los Gobiernos Regionales y 1,000 en las Sanidades de Defensa e Interior. Si a esta cifra le sumamos el sector privado, son en total unos 15,000 médicos especialistas los que necesita el país.
Uno de los logros de la reforma de la salud debería ser la vacunación de todos los niños y personas vulnerables del Perú. Este componente de gran impacto en la salud tiene, para vergüenza de nuestro país, un magro resultado. El 2011 sólo se alcanzó el 73.9% del total de niños menores de 3 años, cuando la meta debió superar al 95%. En el 2013, durante la Reforma de Salud, se ha llegado solo al 67.6%, es decir, un retroceso.
El Ministerio de Salud ha promulgado el sábado 28 de junio del 2014 la Resolución Ministerial 486-2014 que aprueba la Guía Técnica Nacional para el aborto terapéutico hasta las 22 semanas de gestación , supuestamente, según lo dispuesto en el articulo 119 del Código Penal.
Desde el año 1924 los médicos del país han efectuado y efectúan abortos terapéuticos para salvar la vida o evitar daños graves permanentes en la salud de sus pacientes. No ha habido un solo caso de muerte o daño permanente que se haya reportado, o alguna estadística confiable al respecto. Esto demuestra que la aprobación de la Guía técnica esta alejada del principio de la realidad y obedece a un horizonte ideológico, en el que, el presente caso no es sino el primer paso hacia la legalización del aborto en nuestro país. Leer más
El rol del Estado y del gobierno es generar confianza y predictibilidad en los mercados. La incertidumbre, el favoritismo al margen de la competencia y la falta de reglas claras y transparentes transforma una economía de mercado pujante en una economía tramposa, mercantilista, que arruina a las empresas y perjudica a los ciudadanos.
La diferencia de precios entre un medicamento de marca y uno genérico es abismal. Por ejemplo: la tira de 10 tabletas de doxiciclina genérica cuesta un sol frente a 45 soles que cuesta el de marca. La doxiciclina es un medicamento que ya no tiene patente, puede ser producido por cualquier empresario. La calidad de ambos productos, genérico y marca, debería ser la misma y el Estado debe asegurarnos que sea así. Eso no ocurre, hay escasez de genéricos en las farmacias y boticas ya que sólo se ofertan los de marca y el control de calidad es casi nulo. Estamos obligados a pagar precios exorbitantes. Leer más