Sobre el cumplimiento de acciones y objetivos estratégicos institucionales
En el Portal del Ministerio de Salud (Minsa), en la sección Informes y Publicaciones, se ha dado publicidad el 17 de mayo del 2024 al Informe de Evaluación Institucional del Minsa correspondiente al año 2023. El texto contiene un resumen ejecutivo, la presentación de las prioridades de la política institucional, el análisis de la implementación de las acciones estratégicas institucionales, las conclusiones, las recomendaciones y los anexos. Cabe precisar que el informe de evaluación se restringe solo al Pliego 011; es decir, a la sede central y las direcciones de redes integradas de salud en las que se incluyen los centros de salud, los hospitales e institutos de Lima Metropolitana.
Según el informe, la evaluación comprende el cumplimiento de ocho objetivos estratégicos institucionales (OEI) y 42 acciones estratégicas institucionales (AEI) que se interpretan con la modalidad de los colores de un semáforo, en el que el color verde, corresponde al cumplimiento de más del 95%, el ámbar en un rango 75%-95% y rojo entre 0%-75% de cumplimiento. Además, los ocho objetivos estratégicos institucionales contienen 25 indicadores que son medidos o cuantificados y cuyos resultados reflejan el nivel de cumplimiento del Minsa. El resultado es que solo 8 indicadores de los 25 tienen color verde, 6 indicadores presentan color ámbar, 4 tienen color rojo y 7 indicadores no presentan medición (rojo). Eso implica que 17 indicadores de los 25 que existen, tienen falencias, incluso, con omisión de información.
En el caso de las Acciones Estratégica Institucionales, son 42 y contienen 69 indicadores. Según el informe, “de los 69 indicadores, se evidencia que 22 presentan avances en un rango mayor o igual al 95% (color verde), 11 indicadores presentan avances entre 75 y el 95% (ámbar), 28 indicadores presentan avances hasta el 75%. (rojo) y 8 indicadores no presentan medición. (rojo). El informe concluye que “los resultados generales señalan que del total de 94 indicadores que componen el Plan Estratégico Institucional (PEI) evaluado, el 32% alcanzó un nivel de avance mayor o igual al 95% (color verde), el 18% alcanzó un nivel de avance entre 75 y el 95% (color ámbar) y el 34% alcanzó un avance debajo del 75(color rojo) y el 16% no presenta medición (color rojo)».
De los 8 Objetivos Estratégicos Institucionales (OEI), a modo de ejemplo es útil enfocarse en el Objetivo Estratégico Institucional 01 que se refiere a la prevención, control y reducción de las enfermedades, daños y condiciones que afectan la salud poblacional, con énfasis en las prioridades nacionales. Este objetivo tiene 13 indicadores y es de lejos, el que más tiene, debido a la naturaleza misma del Minsa. Sin embargo, solo tres de ellos, están en color verde, es decir, tienen un cumplimiento igual o mayor al 95%.
El primero está en relación con la “proporción de mujeres que sufrieron violencia física o sexual ejercida por el esposo o compañero en los últimos 12 meses”, que tiene un avance de 118.1%, es decir, mayor que el logro esperado. El segundo, es la razón de mortalidad materna por 100,000 nacidos vivos” que ha alcanzado 100%” y el tercero es “la proporción de niñas y niños de 12 meses y 29 días de edad con vacunación completa que alcanzó el 99.36%”.
Como es obvio, los otros 10 indicadores restantes tienen falencias. Los que están con el color rojo son 3. El primero de ellos es la “prevalencia de anemia en niñas y niños de seis a 35 meses de edad que sólo ha alcanzado 44.1%. El segundo es la “prevalencia de desnutrición crónica en niños y niñas menores de cinco años de edad con un 41.7%. El tercero, está en relación con la omisión de la información, que son 5 indicadores: “tasa de mortalidad por suicidio por 100,000 habitantes; prevalencia de hipertensión arterial en personas de 15 a más años de edad en tratamiento, con presión arterial controlada; tasa de mortalidad de tuberculosis por 100,000 habitantes; tasa de mortalidad por cáncer por 100,000 habitantes y proporción de embarazo en adolescentes». Según el Informe, no existe justificación alguna para la falta de medición, ya que son indicadores esenciales.
Asimismo, la “evaluación de implementación del Plan Operativo Institucional (POI) anual 2023 ha presentado los siguientes resultados: del total de 16,322 actividades, el 65.92% alcanzó un nivel de ejecución de bueno y exceso y el 34.08% entre regular y deficiente” con un Presupuesto Institucional Modificado de 9,554,279,161 soles por toda fuente de financiamiento que alcanzó una ejecución presupuestal del 95.89%. También, el Informe resalta que, por un lado, que las unidades ejecutoras con grado cumplimiento bueno son la del Hospital de Emergencias de Villa el Salvador (97%), la del Instituto Nacional de Salud Mental (97%) y la del Hospital de Emergencias Pediátricas (95%). Por otro lado, resalta a las unidades ejecutoras que han tendido el menor desempeño, como son, el Programa Nacional de Inversiones en Salud (PRONIS) con 40%, la Dirección de Redes Integradas (Diris) de Lima Este (37%), la Diris Lima Centro (32%) y el Programa de Creación de Redes Integradas de Salud (PCRIS) con 17%.
En la parte final del Informe se han consignado 9 recomendaciones. Estas, como es obvio, están en relación con la mejora de los indicadores ya conocidos. Sin embargo, es necesario agregar nuevos indicadores que tengan relación directa con la gestión de determinantes sociales de salud. El Minsa no solo debe dedicarse a fortalecer los servicios de salud, a la prevención de las enfermedades, la recuperación y la rehabilitación de estas, y de la promoción de la salud, sino que también debe insistir en plasmar en indicadores, para ponerlos en práctica, los aspectos consensuados en el marco del Plan Multisectorial, con los otros 14 ministerios, cuyas actividades tienen relación directa con los determinantes sociales de la salud.
Como es obvio, el Plan Estratégico Institucional del 2023 ha sido una herencia de la anterior gestión ministerial y la evaluación ejecutada del 2023 solo mide la variación incremental de ese plan, sin tomar en cuenta las nuevas propuestas. Por lo tanto, el planeamiento del año 2024 debería incluir las nuevas propuestas que ya se han normado en el Minsa. En ese contexto, es necesario incluir los cambios introducidos para la conformación de Redes Integradas de Salud (RIS) y en la gestión de los determinantes sociales de Salud. ¡Defectuosa selección de indicadores y magros resultados!