Los hospitales, centros de salud, postas médicas y demás establecimientos de atención médica del Ministerio de Salud y de Essalud, están brindando atención a la población por personal NO MEDICO, sin el conocimiento y menos el consentimiento de los pacientes, lo que configura una estafa.
Por ejemplo, cuando llega un paciente con presión alta al centro médico es derivado para ser atendido por una enfermera quien lo examina y prescribe medicamentos directamente. Una gestante acude a cualquier hospital de Essalud y es asignada automáticamente a una "doctora" que NO ES MEDICO sino obstetriz. En el caso de niños de 0 a 5 años en el programa de crecimiento y desarrollo son evaluados por enfermeras y no por pediatras. Lo mismo ocurre con los análisis de laboratorio los cuales no son realizados por médicos, sino por técnicos. El denominador común en estos casos es la sustitución de médicos por otros profesionales. Se niega así, el derecho elemental de la población a ser atendida por médicos.
Esta situación origina 3 daños:
1.- La ineficacia e ineficiencia de los establecimientos médicos, con grave perjuicio de la salud de la población, instituciones que están obligadas a brindarle a los pacientes servicios científicamente fundados y de contenido ético, que sólo el médico puede ofrecer.
2.- La violación del derecho a la intimidad de los pacientes. Los enfermos son desvestidos y revisados en su intimidad, sin la correspondiente confidencialidad y secreto profesional que le da la profesión médica.
3.- Es una estafa de parte de las instituciones médicas públicas ya que al paciente no se le informa que su atención no esta en manos de un médico. La motivación de las autoridades para promover esto es que se abaratan costos en detrimento de la salud de la población.
La Asociación Médica Peruana pide a los medios de comunicación se sirvan alertar a la población de estos sucesos, para que defiendan su derecho a ser atendidos por médicos.
Marzo 2003